Los suplementos alimenticios tienen la función de incrementar, complementar o suplir alguno de los
nutrientes que generalmente adquiriríamos a través de los alimentos de nuestra dieta cotidiana.
Cuando nuestra dieta no es suficiente, los suplementos alimenticios aportan nutrientes como
proteínas, grasas, carbohidratos, vitaminas y minerales necesarios para el funcionamiento adecuado de
nuestro organismo.
Son productos a base de hierbas, extractos vegetales, alimentos tradicionales, deshidratados o
concentrados de frutas, adicionados o no, de vitaminas o minerales, que se puedan presentar en forma
farmacéutica (cápsula, emulsión, suspensión, jarabe, polvo, soluciones y tabletas, entre otras).
Una forma de aprovechar al máximo el beneficio de los suplementos, es revisando su lista de
ingredientes y conocer el beneficio que puede aportar cada uno de los mismo.